Santiago Tapia, estudiante de noveno grado, estaba con su novia, pero minutos antes de la tragedia decidió pedirle que se fuera para su casa.
Como Santiago Felipe Tapia Brochero, de 16 años, fue identificado el adolescente que murió al caerle un rayo, en medio de una tormenta eléctrica, en el municipio de Calamar, en Bolívar.
Lo que se conoce de este caso es que el menor, conocido en la comunidad como ‘Mingo’, estaba al lado del muro de contención del río Magdalena, en el sector Sagrado Corazón de Jesús del Barrio Abajo, y se ubicó debajo de un frondoso árbol para protegerse de la lluvia. Eran las 9 de la noche del sábado 19 de agosto.
Parecía un aguacero normal, cuando comenzó a iluminarse el cielo por la presencia de relámpagos, truenos y, en medio de estos, un rayó cayó en el sitio donde estaba Santiago Felipe, estudiante de noveno grado.
Tras escucharse un estropicio, habitantes de la zona llegaron hasta donde estaba el menor y evidenciaron que recibió una descarga eléctrica. Intentaron llevarlo a un centro médico, pero nada se podía hacer por él: estaba muerto.
Medios de ese municipio y sectores cercanos al Canal del Dique informaron que Santiago estaba en compañía de su novia, pero él le pidió que se fuera para su casa y cuando la también menor tenía unos minutos de haberse marchado, ocurrió la tragedia.