Análisis: Crisis en el Gobierno Petro
Myriam Campo
Recientemente las decisiones del Presidente Petro han desencadenado la mayor crisis política de sus 9 meses de Gobierno, ocasionando una ruptura en su gobernabilidad y gobernanza. Petro pidió la renuncia protocolaria de su gabinete y anunció el fin de la coalición con los partidos tradicionales. El nuevo tetris político del país ya está armado, los cambios se dieron con la Dirección del DAPRE y a nivel ministerial se dieron en el Ministerio de Salud, Hacienda, Interior, Agricultura, Ciencia, TIC y Transporte, teniendo presente que hace meses también se dieron cambios de ministros en las carteras de Educación, Deporte y Cultura.
La nueva semántica y narrativa discursiva de Petro es hablar sobre un Gobierno de Emergencia, este cambio en el discurso no es accidental, es una respuesta a meses de conflictos con su coalición política, que finalmente se reflejó en las discusiones sobre el controvertido apoyo hacia la reforma de la salud. Dentro del imaginario de Gobierno del presidente, él pretendía presuntamente intercambiar apoyos a favor de sus reformas a cambio de puestos burocráticos, pero, la historia fue totalmente diferente.
Difícilmente las reformas de salud, pensional, laboral y demás avanzaran en el Congreso, hay que tener presente que entre más cerca estemos del día de las elecciones regionales se le hará más difícil el trámite legislativo a Petro en términos de gobernabilidad, y no será por un complot en su contra, simplemente sus iniciativas son nocivas para el país y no hay mermelada suficiente para segar la cordura y toma de decisiones de los congresistas.
Además, el ajedrez político de dirigentes y partidos en estos meses estará guiado por una agenda de intereses electorales y la agenda de Gobierno Petro quedará en segundo plano. Por lo que, el Presidente seguirá gobernando a través de twitter y querrá sencillamente imponer y demostrar que esta por encima del Congreso, generando más incertidumbre para el país y acrecentando la crisis política.
Finalmente, hay que resaltar que Petro es uno de los dirigentes políticos de América Latina que representa a la segunda ola del llamado socialismo del siglo XXI, postura ideológica que ha fracasado, que ha destruido economías e instaurado dictaduras en la región. En Colombia tenemos una amenaza latente, nuestra democracia está en riesgo y estas crisis de Gobierno son señales de alarma, porque las elecciones locales de octubre serán de vital importancia para impedir que se repliquen modelos socialistas fallidos. El país necesita de líderes que mantengan la calma, tengan comunicación asertiva, transmitan estabilidad y no fomenten más división.
