Abuelita se desmayó haciendo fila para cobrar el ‘Adulto Mayor’
El pasado viernes 17 de marzo, Elia Acosta, una mujer de 83 años y habitante de la vereda Nueva Platanera del municipio de Tierralta, salió a cobrar el subsidio del programa Colombia Mayor para adultos mayores.
Sin embargo, encontró una escena desoladora: ventanillas repletas y una gran aglomeración de personas, en su mayoría adultos mayores, que hacían fila bajo el inclemente sol de estos días para recibir el incentivo económico.
Minutos después de estar en la fila, la anciana sufrió un desmayo debido a la temperatura y las dolencias propias de su edad. Las personas que se encontraban en el lugar la auxiliaron, la sentaron en una silla y le brindaron agua y atención hasta que la mujer de 83 años recuperó el conocimiento.
Imágenes grabadas con un teléfono móvil reflejan el drama que enfrentan estos adultos mayores que tienen que soportar las largas filas y las inclemencias del clima para recibir el subsidio mensual. “Estos son señores de más de 70 años que necesitan una mejor atención y no deberían esperar a que se desmaye una señora para que puedan organizar todo”, dijo uno de los testigos del hecho.
Los familiares de los beneficiarios denuncian que el subsidio se está manejando de manera inadecuada y que el programa debe contar con un sitio más organizado y amplio, donde los adultos mayores no tengan que esperar bajo el sol. Esta situación podría prevenir episodios como el de la señora Elia Acosta.
Un testigo del hecho expresó su preocupación por la falta de atención adecuada a estas personas, señalando que “estos son señores de más de 70 años que necesitan una mejor atención y no deberían esperar a que se desmaye una señora, que se desmaye otra señora, para que entonces puedan organizar todo”.
Aunque el gobierno nacional anunció que los adultos mayores de 90 años comenzarán a recibir el incentivo económico a domicilio en los próximos días, la comunidad exige que se atienda también a los adultos entre 70 y 80 años que necesitan una atención adecuada y condiciones más humanas para recibir su subsidio.
“Es necesario que se incluyan a los adultos entre los 70 y 80 años en el sistema de pago domiciliario, ya que muchos de ellos sufren dolencias y enfermedades que les impiden hacer largas filas bajo el sol o la lluvia”, dijo un familiar de uno de los adultos mayores
Si bien el dinero que reciben puede aliviar algunas situaciones económicas en sus hogares, no se justifica que tengan que vivir en condiciones inhumanas debido a su edad para poder adquirirlo.
