Violencia vicaria, la agresión de la que poco se habla
Medicina Legal reportó que entre enero y julio de 2022, la violencia hacia las niñas ha superado lo registrado en el año 2021. Ante este escenario, World Vision reconoce las necesidades de las niñas en el país y reafirma su compromiso en trabajar para ellas.
El 11 de octubre es catalogado por la UNESCO como el Día Internacional de la Niña, una fecha que busca desde hace diez años comprender y combatir la violencia de género, la discriminación y reafirmar los derechos de las niñas a nivel mundial.
Para países como Colombia, esta fecha representa una oportunidad especial para combatir las altas cifras de violencia y asesinatos que se han registrado entre enero y julio del 2022, pues según Medicina Legal, 307 niñas y mujeres adolescentes perdieron la vida por causas como homicidios, accidentes y suicidios, una cifra que ya supera las 264 que se registraron en el año 2021.
Asimismo, las cifras sobre lesiones no fatales publicadas por Medicina Legal en su Boletín Estadístico Mensual de Infancia y Adolescencia resultan alarmantes. Se estima que en el país, en la primera mitad del año, 15.182 niñas han sido víctimas de violencia: sexual, interpersonal, intrafamiliar, de pareja y otros tipos de agresiones.
En este contexto, también es alarmante como mecanismos de violencia como la denominada violencia vicaria, (que es una agresión instrumental y punitiva realizada por el agresor, quien busca controlar, castigar y violentar a la mujer al dañar a sus
hijos/hijas) no es reconocida públicamente y no es incluida en centros de información como los boletines de Medicina Legal.
Frente a esta crisis de violencias que sufren las niñas, organizaciones como World Vision han identificado distintos mecanismos con los que se puede hacer frente a estas violencias y vulneraciones de derechos. Al respecto Heidy Arévalo, Gerente de Gestión de la Estrategia y Conocimiento, menciona:
“Los esfuerzos deben concentrarse en el fortalecimiento de las redes comunitarias e institucionales. La identificación temprana de los síntomas psicosociales que a nivel escolar se logre hacer, así como la acción solidaria y colectiva por parte de las organizaciones comunitarias y basadas en la fe, reducen el riesgo de perpetrar la violencia”.
Además, Heidy señaló como se deben seguir fortaleciendo las capacidades institucionales para identificar oportunamente las violencias contra niñas, donde es importante activar acciones inmediatas a nivel comunitario e institucional y avanzar en la superación de todas las formas de violencia.
“En World Vision seguimos comprometidos trabajando con las comunidades, instituciones educativas y organizaciones basadas en la fe. Así como trabajar en incidencia de la agenda pública para que las medidas normativas se orienten bajo el
principio rector del interés superior de las niñas y niños”, afirmó.
En esta misma línea, la UNESCO señala que todos desde su accionar diario pueden realizar aportes por los derechos de las niñas y las adolescentes, en este escenario, resaltan acciones como:
Compartir historias de niñas que estén cambiando las cosas, para así dar una mayor visibilidad y apoyo; generar presión para incluir a los funcionarios gubernamentales, responsables políticos y a las partes interesadas para que realicen inversiones y
esfuerzos específicos para hacer frente a las desigualdades y derechos de las niñas; reafirmar los compromisos de inclusión a las mujeres en todos los sectores; y realizar compromisos personales de interés para generar conversaciones en círculos sociales
frente a las condiciones de vida de las niñas.
