Las precarias condiciones laborales obligaron a los guardianes de la cárcel municipal de Lorica a abandonar sus funciones y dejar solo el centro reclusorio.
Samuel Bravo Patrón, uno de los guardianes de la cárcel, dijo que la decisión la tomaron porque les deben varios meses de salarios, están sin seguridad social y varios de sus compañeros están enfermos, uno de ellos con Covid-19 e internado en UCI en la ciudad de Montería.
Esta cárcel estaba bajo la administración del INPEC, sin embargo, la sacó de su carga y la dejó en manos de los alcaldes de la subregión, en este caso los del Bajo Sinú y zona costanera.
Desde ese momento, todos los alcaldes deben hacer sus aportes para el sostenimiento y no todos están cumpliendo.
Por el momento, y a manera de solucionar temporalmente el problema, se han enviado a dos mujeres para atender la custodia de los detenidos. Según los guardianes, ellas no tienen la experiencia.
Tomado de GS Noticias
