A través de una investigación por tráfico de animales en Colonia, Alemania, la Policía encontró a cuatro cachorros escondidos al interior de una nevera, que en el momento del decomiso no estaba encendida. Varios también fueron hallados en el inmueble, entre los que se encontraban perros de raza chihuahua, caniche y bulldog francés.
Dichos perrors de raza bichón maltés, fueron puestos a disposición de refugio ubicado en esa ciudad para ser valorados por el personal médico veterinario.
Según los investigadores habían contactado a las cuatro mujeres de 61, 42, 22 y 20 años, con el pretexto de comprar cachorros para darlos como regalo de Navidad, pero esto fue solo una fachada para descubrir el tráfico de animales que se estaba adelantando en Colonia y Düsseldorf.
Estos ejemplares en venta eran ofrecidos por internet; en los anuncios, los vendedores aseguraban que los perros contaban con las vacunas necesarias.
No obstante las autoridades alemanas hicieron un llamado a la ciudadanía para no comprar cachorros cuyo origen no pueda rastrearse con facilidad en los medios digitales o en el mercado, como tampoco adquirirlos en estacionamientos u otros lugares que promuevan el comercio ilegal y/o el maltrato animal.
“Los protectores de animales señalan que los perros jóvenes sufren a menudo y se entregan al tormento antes de que puedan comer solos. Por favor, absténgase de comprar y verifique cuidadosamente antes de comprar un perro”, escribió la policía de Colonia en una publicación de su cuenta en Facebook.
Los hechos ocurrieron a comienzos de diciembre, pero cobraron relevancia luego de que se volvieran virales las fotografías de estos animales, los cuales se encontraban en deplorables condiciones.
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