¡Por fin tenemos una ley que fomentará la sostenibilidad, la formalización y la reactivación del sector turístico del país durante los próximos 50 años! Será a través de mecanismos que impulsen el fortalecimiento y la competitividad en la industria, y que promuevan rápidamente su recuperación para hacer de Colombia un destino de talla mundial.
El sector turístico ha sufrido como nadie los efectos devastadores de la pandemia. Esperábamos recibir un millón de visitantes extranjeros más este 2020, sin embargo, toda la expectativa se fue a pique y con ello la buena racha del 2019, donde Colombia batió record en esta materia: 57 por ciento de ocupación hotelera (la mejor de los últimos 16 años) con más de cuatro millones y medio de pasajeros no residentes que llegaron al país y la generaron 6 mil 785 millones de dólares en divisas por viajes y transporte aéreo de pasajeros.
Según cifras reportadas por los gremios, el desplome de esta industria ha ocasionado más de 18,66 billones de pesos en pérdidas y alrededor de 2 millones 300 mil empleos han sido reportados como afectados o en riesgo. Por eso la aprobación de esta ley, de la que me siento orgullosa de haber sido coautora y coordinadora ponente en el Senado de la República, representa un salvavidas en estos momentos difíciles para el sector y para las miles de familias que derivan su sustento de los empleos que este genera.
Entre las medidas que aprobamos y que tendrán vigencia hasta el 31 de diciembre de 2021 destaca la exención del IVA para los servicios de hotelería y turismo, lo que representa un incentivo para el turista que no deberá pagar este impuesto y un alivio para los empresarios, quienes podrán descontar el IVA en que incurrieron por concepto de la compra de productos para prestar el servicio de turismo exento de este impuesto; la exclusión del IVA para la comercialización de artesanías colombianas y para el expendio de comidas y bebidas a través de contratos de franquicia durante todo el próximo año. Así mismo, para el 2021 el cobro de la tarifa del impuesto al consumo será del 0 por ciento para más de 130 mil restaurantes y bares, y se supenderá el pago de la sobretasa a la energía para los prestadores de servicios turísticos de los subsectores hotelero, alojamiento, eventos y parques.
Pero las buenas noticias no paran allí. Queremos que los colombianos y los extranjeros sigan viajando por el país, y para incentivarlos se reducirá el IVA del 19 al 5 por ciento para los tiquetes aéreos de pasajeros y paras los servicios conexos como las maletas, la comida extra en el vuelo, entre otros, hasta el 31 de diciembre de 2022. Igualmente, otro alivio importante que beneficia directamente a los prestadores es la eliminación de la sanción para la renovación del Registro Nacional de Turismo hasta marzo del próximo año.
No olvidamos la difícil situación por la que atraviesa San Andrés, Providencia y Santa Catalina debido a la pandemia y al Huracán Iota. Como sabemos que nuestro archipiélago en su mayoría vive del turismo, presentamos unas medidas para su reactivación y reconstrucción: estará excluido de los aportes de cofinanciación para la presentación de proyectos ante FONTUR y, sumado a esto, de los 15 dólares que paga un turista que entra el país por impuesto al turismo, se destinará un dólar para invertir en la recuperación de su infraestructura. Además, las personas naturales y jurídicas nacionales que desarrollen actividades turísticas y que cuenten con un establecimiento de comercio en la isla tendrán derecho a deducir de la renta el 200 por ciento del valor de los salarios y prestaciones sociales que paga por sus trabajadores, durante todo el 2021. Por último, los recursos del impuesto con destino al turismo podrán utilizarse para brindar asistencia y recuperación de emergencias como el reciente desastre ocasionado por el Huracán.
Es un deber conservar, proteger y aprovechar los destinos y atractivos turísticos de Colombia, por eso con esta ley no solo reactivaremos el sector, sino que también lo haremos sostenible de aquí a 50 años, cuidando nuestro patrimonio cultural y natural. Con las medidas de cambio climático queremos minimizar la huella de carbono que deja este sector en nuestro ecosistema e imponer sanciones por infracciones a su conservación. Por eso, gracias a una proposición que presentamos, logramos incluir medidas especiales para contrarrestar la erosión marina en los municipios costeros de todo el país. Por otra parte, se pondrá en funcionamiento los puntos de control turístico para regular la capacidad de carga de los atractivos, con el fin de evitar aglomeraciones que pongan en peligro el patrimonio ambiental.
Sabemos que este no es un camino fácil, pero confiamos en que los colombianos harán su parte por el bien de nuestro ecosistema y por el bien de nuestra economía. Mientras tanto, y para darle un impulso a estas medidas, se aprobó el incentivo de un descuento del 25 por ciento de la renta para inversiones realizadas en control, conservación y mejoramiento del medio ambiente.
La formalización y la calidad del servicio también entran dentro de este paquete de medidas. Es así que se incluyó la prohibición expresa de prestar servicios de alojamiento turístico a menores de edad que no estén acompañados o cuenten con el permiso de sus padres o responsables legales. Pero esto no termina aquí, todo municipio o distrito que tenga jurisdicción en playas turísticas, deberá disponer junto con la DIMAR, de rescatistas o salvavidas para proteger a los bañistas y para garantizar la limpieza y conservación de nuestras playas.
El turismo es el propósito que nos une, y la aprobación de esta Ley en el Congreso lo demostró. Destaco el diálogo permanente entre el Gobierno Nacional ¬a través del Presidente Duque, el ministro de Comercio José Manuel Restrepo, el viceministro Julián Guerrero y el Ministerio de Hacienda– con el Congreso y todos los gremios. Gracias a esa determinación, hoy contamos con una ley inclusiva y con soluciones a corto, mediano y largo plazo. Esta iniciativa, en definitiva, nos permitirá hacer de nuestro país un destino turístico sostenible, competitivo y de talla internacional. ¡El turismo se reactiva!
Encima: Gracias a la determinación del Centro Democrático, los trabajadores colombianos tendrán mas bienestar: la reducción gradual de la jornada laboral semanal sin afectar el ingreso de las familias es una gran noticia para Colombia.
