Una aterradora historia de persecución rodea la desaparición de un menor de 13 años en el río Cauca, a la altura del municipio de Tarazá.
Los hechos se presentaron el pasado 6 de noviembre, pero solo se conocen hasta este lunes, luego de que el Ejército y la Policía busquen el cuerpo del niño que huyendo con su padre de las bandas criminales cayó en las corrientes del cauca.
La historia
Se conoció que un hombre y su hijo de 13 años de edad viajaban de Medellín a Tarazá la tarde del viernes 6 de noviembre en un carro al que se le pinchó una de las llantas en el sector El 15 de Valdivia, límites con Tarazá. Mientras arreglaban el vehículo hasta allí llegaron dos sujetos armados intimidando e indagando al conductor.
Luego de interrogar al conductor, quien es el padre del menor, le dijeron que tenían que ir a la orilla del río Cauca para requisarlos.
El hombre y el niño decidieron seguir las órdenes y cuando iban en el camino el padre enfrentó al sujeto armado, le quitó la pistola e hizo varios disparos, ocasionando que los hombres se fueran del lugar, situación que fue aprovechada para huir con su hijo.
Como pudo el padre del menor prendió el carro en las condiciones que se encontraba y siguió su camino, pero más adelante, fue alcanzado nuevamente por los sujetos, quienes llegaron con otra arma de fuego y les dispararon, en la reacción ellos bajaron del vehículo y se escondieron en el monte a la orilla del río.
En el desespero el niño logró llamar a un familiar y avisar que estaban en peligro de muerte.
Ya entrada la noche mientras estaban escondidos en medio de la maleza ellos escucharon a los sujetos decir que si los encontraban los iban a matar, lo que les generó más pánico.
Luego de varias horas y de caminar por la orilla del río encontraron una canoa en la que decidieron subirse y huir del sitio.
Cuando iban por el corregimiento El Doce la canoa entró a un remolino y ocasionó que se volcara, cayendo los dos al agua. Como pudo, el padre se agarró de la barca que quedó dando vueltas y pudo salir a la orilla, mientras que el menor se sumergió y no salió más.
Apenas amaneció el padre empezó a buscar a su hijo sin obtener resultados alentadores. Entonces avisó al Ejército de lo ocurrido. Ante este caso, las autoridades de Tarazá iniciaron las labores de búsqueda por el río Cauca para hallar el cuerpo del menor.
La Policía también fue informada del suceso y llegó al lugar donde se encontraba el vehículo sobre la troncal de Occidente, logrando la captura de dos sujetos señalados de intimidar al menor y a su padre, quienes tenías en su poder un revólver calibre 38 y 10 cartuchos para la misma. También se incautó una motocicleta en la que se movilizaban.
