El exjefe de las Autodefensas, Salvatore Mancuso confesó este viernes que el asesinato y desaparición del líder indígena Kimmy Pernía en 2001 en el departamento de Córdoba fue un crimen de estado.
Aseguró que recibieron la orden de las “Fuerzas Militares para asesinarlo y desaparecerlo, luego su cuerpo fue lanzado al río Sinú en el planchón de Calleja en Córdoba.
La información surgió en diálogos con población indígena, donde Salvatore Mancuso conversó con una líder indígena Embera, llamada Marta Cecilia Domicó.
“En el proceso de Justicia y Paz pude contar algunas cosas. Lo del líder indígena Kimmy Pernía Domicó fue un crimen de Estado, yo como miembro de factor recibí una orden del comandante Carlos Castaño en este sentido de asesinar. Nuestras órdenes eran dar de baja al líder Kimmy Pernía. Las excusas que estaban dando porque fueran excusas. Recuerden que el Estado los censaba”, advirtió Mancuso.
Prosiguió: “Cuando construyen Urrá fue una decisión sin consulta que los afectaba directamente a ustedes como comunidad. Empezaron acciones sistemáticas del Estado para debilitarlos a ustedes. Y terminar cualquier intento de reivindicar o materializar sus derechos. Es por esto que en ese entonces, esa pugna tan grande y a ustedes empiezan a censarlos. No les permitían ingresar libremente alimentos. Nosotros hacíamos retenes. Señalaban a sus comunidades como colabores en algunos casos y en otros como colabores de la guerrilla”, puntiualizó Mancuso.
