Nacional

Jabones y alcohol colombianos llegan a 23 países en la pandemia

Se trata de la empresa Hada Internacional, que, simplificando su catálogo de productos, logró abastecer con jabón, alcohol y gel antibacterial a los países más afectados por la epidemia del nuevo coronavirus.

Publicidad

La aparición del nuevo coronavirus hizo que los ojos del mundo miraran hacia la extensa capital de la provincia de Hubei en China: Wuhan. El mundo, que desde 2003 no se enfrentaba a una epidemia de síndrome respiratorio agudo grave (SRAS), se preparaba para responder al impacto del COVID-19 sin pensar que el virus se convertiría en la primera pandemia prácticamente universal. Elementos de aseo y desinfección como el jabón y el alcohol se volvieron el escudo más sencillo y accesible contra el extraño virus, del cual apenas se conocían algunos datos recién se identificó. En este contexto, Hada Internacional, empresa colombiana de elementos de aseo de Barranquilla, puso a tope su producción.

En todo el mundo los efectos del COVID-19 se empezaron a sentir. Los países entraron en cuarentena, los negocios cerraron y la gente agotó todos los jabones y alcohol en los aparadores de almacenes y droguerías. Hace más de sesenta años, cuando este panorama era remoto e inesperado, nació entre las montañas de la región cafetera Hada Internacional, empresa dedicada a la elaboración de productos de aseo personal y del hogar. Y hace diez, buscando abrirse camino en el negocio internacional, mudó su planta de operaciones a Barranquilla.

Rodrigo Gutiérrez, gerente de la empresa, le dijo a El Espectador que “cuando se conocieron los primeros casos de coronavirus en China y Europa, empezamos a pensar cómo abordaríamos la crisis, entendiendo que jugamos un papel importante en el abastecimiento de los productos que le hacen contra a la pandemia”.

Publicidad

Como primera medida, Hada puso en pausa algunas de sus trece líneas de producción, decisión que tomaron sus directivas con un propósito: evitar el desabastecimiento. La empresa acordó “simplificar el catálogo y poder llegar con mucha más fuerza a los mercados”, explicó Gutiérrez. Se le dio prioridad a la producción de jabón y alcohol, así como a la fabricación de gel antibacterial, un producto nuevo para la empresa.

La empresa escogió, básicamente, los elementos de aseo personal que más ha recomendado la Organización Mundial de la Salud. Desde el inicio, esta entidad intergubernamental advirtió al público que una de las maneras que tenía la gente para ayudar a detener la propagación del virus era “lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón o con un desinfectante a base de alcohol”. También fue necesaria la contratación de más personal. Es así como, en plena pandemia, Hada tiene 500 empleados y, en contraste con otros negocios, aumentó su mano de obra en un 20 %.

De acuerdo con Gutiérrez, aunque los efectos del COVID-19 no han afectado a la empresa, sí han impulsado a mantener al personal protegido. En sus palabras, “hemos bajado la intranquilidad que siente la gente en momentos como este, lo que nos permitió seguir operando y abasteciendo los mercados”. Durante la pandemia, sus productos están llegando a 23 países, siendo los países más afectados por el coronavirus los principales destinos, España y Estados Unidos, en donde las cifras de muerto ya superaron los 27.000 y 103.000, respectivamente. No es coincidencia que sean los principales mercados que solicitan, sobre todo, jabón.

Además, la empresa está detrás de las marcas propias de los supermercados Ara y Justo y Bueno. Y no se ha quedado allí. De acuerdo con Gutiérrez, “solamente el mes pasado hicimos una fabricación superior a las 150 toneladas de gel antibacterial, que se quedó en su totalidad en el mercado nacional”. Gutiérrez también afirma que los patrones de consumo han cambiado durante la emergencia, haciendo que la compra de los productos se vuelque a internet.

Publicidad

La compañía también adelanta un proceso con sus empleados, pues según su gerente, “es muy importante desarrollar un liderazgo consciente en este momento que inyecte confianza y sea humilde. Eso se ve reflejado en nuestro equipo, la gente está muy tranquila”. Luego de la pandemia, la empresa espera abrir más plantas en la zona franca de Barranquilla con una inversión de US$8 millones.

¿Le resultó útil este artículo?
Lee también:
Publicidad