El extraño crimen se habría producido en el país y la víctima fue Helena Laserna, integrante de la familia dueña de la universidad de Los Andes.
La joven estaba en situación de discapacidad y ya hay varias personas capturadas por este crimen que se habría gestado por una mezcla de locura, poder y dinero.
Así lo describe la revista Semana, que publica este domingo una investigación sobre las posibles causas de la muerte (o asesinato) de la pequeña Helena, en 2016, y en las que estarían involucradas su madre, Liliana Laserna, y su padrastro Camilo Fidel Pinzón, hoy en día en la cárcel.
La menor víctima hace parte de una familia que, según describe ese medio, se ha caracterizado por producir intelectuales, académicos, políticos y politólogos, entre otros. Sin embargo, también se caracteriza por historias trágicas como la de Juan Mario Laserna, el reconocido economista, senador y exintegrante del Banco de la República que falleció hace 3 años en un accidente automovilístico.
En una breve reseña sobre la vida de Helena, Semana asegura que nació con autismo en 1998, cuando Liliana asumió su rol de madre soltera, y, tiempo después, conoció a Camilo en Ibagué y vivieron los tres en una finca familiar ubicada cerca de Sesquilé (Cundinamarca).
Ese mismo medio asegura que se trataba de una relación muy conflictiva, entre otras cosas, porque Liliana tenía un problema mental y Camilo una “personalidad dominante”. “Al hacerse esto evidente todos los hermanos se preocuparon por el bienestar de la joven Helena, quien al ser una menor autista requería de cuidados especiales y estaba en situación de indefensión”, describe Semana.
Tal fue la preocupación de la familia, que en 2008 pidieron intervención del Icbf y la niña fue separada de su madre y del padrastro e internada en una institución social en Bogotá. Sin embargo, tiempo después, y cuando tenía 9 años, fue devuelta a su madre y a su padrastro.
Varios años más tarde, en 2016, cuando Helena ya tenía 17 años se volvieron a conocer noticias suyas relacionadas con que su custodia había quedado en manos de Camilo, su padrastro, quien se la habría llevado para donde una hermana que vivía en Mosquera (Cundinamarca). Según Semana, su intención, supuestamente, era llevarla a un tratamiento en el exterior para trasplantarle células madre y curarla del autismo.
Tal versión generó temor entre la familia Laserna y la defensa de la joven la asumió Dorotea, la hermana mayor de esa familia. Semana cita algunos detalles que se gestaron desde diciembre de 2018 y que dan cuenta de lo que, posiblemente, habría ocurrido con la menor y cómo se produjo su muerte:
En ese mes, a Liliana le contaron que su hija murió por dicho tratamiento de células madre en Chile y que, supuestamente, 8 niños más murieron. Además, que los científicos a cargo del tratamiento se suicidaron. Esta versión, según Semana, es falsa.
La familia Laserna denunció el caso de la desaparición de la niña ante la Fiscalía, y las primeras conclusiones fueron: “1) La menor estaba muerta, 2) Liliana no tenía conocimiento de cómo había fallecido su hija y 3) Camilo le mentía a Liliana sobre lo sucedido”.
Existen varias conversaciones entre Camilo y Liliana en las que hablan de la muerte de la menor y, presuntamente, intentan encubrirla. Además, hay otra evidencia de que Camilo presentó un certificado falso de defunción que se expidió en Chile y que da cuenta de que la joven Helena murió el 8 de julio de 2017 por, supuestamente, “distrofia muscular”.
La investigación de Semana concluye con varias hipótesis. Una da cuenta de que Helena no había sido asesinada, sino que la dejaron morir por inanición (Extrema debilidad física provocada por la falta de alimento), pues hay fotos de sus últimos días en las que aparece “esquelética”.
Otra versión, citada por ese mismo medio, da cuenta de que Medicina Legal encontró en la finca de los Laserna, en Sesquilé, un cuerpo incinerado que sería el de la joven Helena. Esta versión cobra importancia por cuenta de unas declaraciones de uno de los trabajadores de la finca que aseguró que, en noviembre de 2016, Camilo y su hermana Claudia Patricia llevaron un bulto en una camioneta, y sería el cuerpo de la menor.
“Según el mayordomo, el cuerpo fue sacado del carro y quemado en una fogata en la misma hacienda. Del lugar donde ocurrió la quema los peritos se llevaron fragmentos que aún permanecían allí y se adelanta un cotejo para determinar si se trata de restos animales o humanos”, asegura Semana.
El medio concluye que existe un testamento en el que, ante una eventual muerte de Helena, el patrimonio pasaría a manos de Camilo, por lo que habría unos intereses claros en el crimen que hoy tiene en vilo y conmovido a un sector de la clase alta colombiana.
