La última audiencia preparatoria de juicio en el sonado Caso Zapa se cumplió ayer miércoles 27 de marzo.
En ella Joyce Hernández Muñoz, confeso asesino de Jairo Zapa Pérez no aceptó los cargos por desaparición forzada y homicidio agravado, por los cuales podría pagar 40 años de cárcel.
Precisamente ayer 27 de marzo se cumplieron cinco años de la desaparición de Jairo Zapa Pérez, quien en ese entonces se desempeñaba como director de Regalías de Córdoba.
En audiencias anteriores se ha revelado que Jairo Zapa aquella tarde de marzo asistió a una reunión con varias personas en el barrio La Castellana, norte de Montería. En ese lugar Joyce Hernández, según su versión, extranguló a Jairo Zapa, metió su cuerpo en un costal y lo enterró en la vía a Planeta Rica.
En esta audiencia tampoco se concretó preacuerdo de rebaja de penas entre la Fiscalía y la defensa del exparamilitar del Bloque Centauros.
Joyce Hernández aceptó su participación en el homicidio de Zapa y fue quien guió a las autoridades y al CTI hasta el lugar donde estaban los restos de su víctima en agosto de 2014.
Hoy el exparamilitar permanece recluido en el centro carcelario Las Mercedes de Montería.
El exparamilitar expresó tranquilidad para la audiencia de juicio oral que quedó pautada para el próximo 23 de julio.
Por este caso también están implicados Jesús Henao Sarmiento, excontratista de la Gobernación de Córdoba, y Maximiliano García, quien fungiera como subdirector de la Oficina de Regalías. Ambos permanecen privados de libertad en Bogotá, además de Zuan Nauidu López Acevedo, compañera sentimental del confeso asesino quien tiene prisión domiciliaria, pues tuvo dos hijos en la cárcel. Ninguno de los tres aceptó cargos por desaparición forzada.
Igualmente siguen vinculados al proceso Carlos Pérez Escobar, primo de Zapa y Jesús Albeiro Torres Redondo, quienes quedaron en libertad por vencimiento de términos, pero siguen vinculados a la investigación.
