Con temor a desaparecer están los habitantes de la vereda Bocas de Seheve en el municipio de Ayapel.
La población de 140 familias que viven en la margen izquierda del río San Jorge está afectada por el deslizamiento del dique de protección de su vereda.
En la zona se han hecho obras de mitigación, pero los habitantes dicen que se necesitan obras definitivas para protegerse de las fuertes corrientes en invierno.
Elver Castillo, líder de proyectos de adaptación al Cambio Climático dijo que recientemente líderes de la población llegaron a Bogotá para pedir ante la Unidad de Gestión del Riesgo una muralla de protección y solucionar el problema, por lo cual esperan resultados antes de que empiece la temporada de lluvias.
Es de recordar que la vereda Seheve está en zona de influencia de Hidroituango, ya que el río Cauca también afecta a la población.
Durante 50 años los campesinos de esta región han resistido los embates de los largos inviernos en Ayapel.