Periodista en peligro de muerte por negligencia de Coomeva E.P.S
Por negligencia de la EPS Coomeva, nuevamente un periodista y profesor universitario se encuentra en grave riesgo de perder la vida, pese a que las autoridades judiciales han ordenado a sus directivas autorizar y ejecutar en una clínica de la capital los procedimientos para intervenirlo de un infrecuente caso de cáncer.
En el caso que compromete la vida del comunicador Iván Mantilla Chaparro, la EPS se ha negado a cumplir el fallo de tutela emitido por el Juzgado 18 Penal Municipal de Control de Garantías, que ampara su integridad física y su salud.
El abogado Juan Pablo Mantilla, hermano del periodista y quien tiene el proceso a su cargo, dice que Coomeva EPS S.A. “dilata el cumplimiento de sus obligaciones con tramitología, arriesgando la vida de sus usuarios”.
El comunicador, que padece un Carcinoma Escamocelular de conducto lagrimal Tumor maligno de la cabeza, cara y cuello – diagnóstico que tuvo que costear de manera particular tras diversas valoraciones equivocadas realizadas por médicos de la entidad -, requiere una intervención urgente para evitar el riesgo de compromiso de otras áreas y órganos de la cabeza o de metástasis en el cuello o el tórax.
“Son unos asesinos. No les importan las consecuencias físicas o psicológicas de su negligencia. Si no realizan la operación con celeridad el riesgo de perder mi ojo o, peor aún, mi vida, es cada vez mayor”, denunció el periodista.
Dada la complejidad del caso de Mantilla, el cirujano de cabeza y cuello de la EPS que lo atendió recomendó la realización del procedimiento en la Fundación Santa Fe de Bogotá, por tratarse de un centro altamente especializado en su patología y donde se hallan todas las especialidades y subespecialidades que se encargarán de su manejo óptimo.
En junta médica realizada en esta institución, el equipo de galenos propuso solicitar que el paciente fuera remitido a la mayor brevedad, para evitar la progresión de la enfermedad hacia el ojo izquierdo, que al parecer no ha sido afectado.
“Mi hermano se vio obligado a entutelar para reclamar la atención de calidad y oportuna por parte de la EPS, pero esto no ha motivado a los funcionarios de la entidad a cumplir con la ley, con lo cual el representante legal podría ser arrestado, pues está incumpliendo la orden judicial que establece un tratamiento integral y con sujeción a las prescripciones del médico tratante. Cabe destacar que quien remite a la Fundación Santa Fe es un médico cirujano de cabeza y cuello adscrito a la red de Coomeva EPS”, dice el abogado.
El proceso de tutela, que usualmente demora 10 días, ha tardado más de 3 meses en ser resuelto.
“Jamás pensé que tuviera que luchar por mi vida de esta manera. Duré más de 1 año con un diagnóstico erróneo y ahora que tengo el dictamen correcto, no pasa nada. Hoy entiendo a muchos colombianos que han sido víctimas del carrusel de la muerte en las EPS”, dijo el periodista.
Según Mantilla, a pesar de su posición de garante, Coomeva EPS deja en un segundo plano la salud de sus usuarios, asumiendo el papel de empresa con ánimo de lucro y olvidando su carácter de prestador de salud.
El procedimiento para salvar la vida de Iván Mantilla, sin incluir los tratamientos de radioterapia, quimioterapia y futuros exámenes, tiene un costo de más de $80 millones.
