Proyectos porcícolas para 400 familias víctimas de San Bernardo y Moñitos, Córdoba
El objetivo es que los beneficiarios puedan comercializar las crías y hacer de esta actividad una solución económica para su familia, acompañados de un equipo técnico que les brinda asistencia médico-veterinaria y de mantenimiento.
Montería, 21 de septiembre de 2018. Mediante un convenio de generación de ingresos, suscrito entre la Unidad para las Víctimas y las alcaldías de los municipios costaneros de San Bernardo del Viento y Moñitos 400 familias que sufrieron hechos de desplazamiento forzado ahora tienen unidades productivas porcícolas con las cuales buscan tener mejores recursos económicos para avanzar con cambios sustanciales en su calidad de vida.
Cada uno de los 200 beneficiarios en Moñitos y los 200 en San Bernardo del Viento, recibieron dos cerdas de famosas razas como pietrain o landrace con capacidad para ser preñadas mediante inseminación artificial, se les entregó una porqueriza en madera sobre concreto y alimentación suficiente hasta que las animales tengan crías.
El objetivo es que los beneficiarios puedan comercializar las crías y hacer de esta actividad una solución económica para su familia, acompañados de un equipo técnico que les brinda asistencia médico-veterinaria y de mantenimiento.
“El proyecto cuenta adicionalmente con un componente psicosocial a través de profesionales del área que acompañaron a los nuevos productores con charlas; lo que queremos es que ellos superen esos hechos que vivieron y se enfoquen en acciones que brinden bienestar”, dijo Manuel Pacheco Salgado, director territorial de la Unidad para las víctimas en Córdoba.
Meribel Madariaga, desplazada del conflicto y una de las beneficiarias del corregimiento La Rada en el municipio de Moñitos, dijo que “nuestra vida ha cambiado mucho gracias a este proyecto tenemos un futuro y una responsabilidad, ya no pensamos en las cosas malas que nos pasaron, sino en lo bueno que viene con nuestros animalitos”.
En el proyecto, la Unidad aportó cerca de $3.000 millones, mientras que las administraciones municipales aportaron más de 330 millones cada una de ellas.
