El dirigente cordobés del partido de la U fue condenado por el alto tribunal a 25 años de prisión por vínculos con las “Águilas Negras” y narcotráfico.
Morales Diz, oriundo de San Antero Córdoba dice que recibió un trato diferenciado frente a Luis Alfredo Ramos por ser éste “blanco” y él “negro”.
El exsenador Martín Emilio Morales Díz fue condenado por la Corte Suprema de Justicia a 25 años y dos meses de prisión por nexos con Las Águilas Negras y narcotráfico, en hechos ocurridos cuando fue alcalde de San Antero entre 2004 y 2007. Desde entonces, el dirigente político de Córdoba ha buscado que ese alto tribunal le aplique la doble instancia y le permita apelar su condena. Aunque la Corte ya le dijo que no el pasado 28 de julio, ahora el excongresista alega ser víctima de discriminación racial.
En una tutela presentada ante la Corte Suprema, Morales Diz y su defensa alegan que se vulneraron sus derechos al debido proceso, a la doble instancia y a la igualdad. Y para ello, expuso un paralelo entre su proceso y el de Luis Alfredo Ramos, procesado por parapolítica. ¿La razón? Que, aunque en ambos casos se presentó ponencia el mismo día, 19 de abril de 2018, él fue rápidamente condenado mientras que el caso de Ramos aún sigue en estudio y fue enviado a la nueva sala de juzgamiento en primera instancia.
Para la defensa, ambos casos son “absolutamente equiparables” y se encontraban en la misma situación fáctica y aun así no se habrían tratado de manera proporcional. Y en su criterio, esto se debe a que es integrante de las comunidades negras “Ku Suto”. Incluso, envió un oficio a la corte en la que se certifica su pertenencia y una carta al tribunal que dice:
“La Sala Penal necesitaba un muerto y dentro del casting de la magistratura yo era el perfecto candidato, era el negro. Había otro candidato, pero era blanco, descartado. El prestigio del minotauro demandaba el sacrificio de un hombre vivo. Así que escogió al negro desde mucho antes de terminar el juicio. (…) A Luis Alfredo Ramos se le garantizó el debido proceso. Ni más faltaba, su origen y connotación le aseguró respeto por su dignidad humana”.
Para su defensa, el supuesto trato diferenciado frente a Luis Alfredo Ramos, fue “discriminatorio y odioso”, sin que se tuviera en cuenta que Morales sería un sujeto de protección especial constitucional en razón de su raza. “Mi representado se siente discriminado. Él siente que lo discriminaron, no encuentra una respuesta lógica, objetiva y razonable de por qué no pudo esperar la Corte un mes largo para enviar su proceso a la Sala Especial de Primera instancia como si lo hizo con ramos Botero”, agrega la tutela.
Morales Diz fue encontrado responsable de los delitos de concierto para delinquir agravado; tráfico, fabricación o porte de estupefacientes; tentativa de homicidio agravado; y porte ilegal de armas y munición de uso privativo de las Fuerzas Armadas. Morales Díz, quien fue absuelto por el delito de homicidio agravado, deberá pagar una multa de 46.600 salarios mínimos legales (más de $36 millones).
Tomado de: El Espectador
